Como no podía ser de otra manera cuando quisimos organizar una paella decidimos que fuera en domingo, y dado que nos vamos a USA en pocas semanas gracias a los centenares de retweets que nos regalaron nuestros amigos, decidimos hacer una buena PaellaTuitera en València el 9 de Agosto de 2015.

Los asistentes a la PaellaTuitera. Foto de @ArrozLaFallera
Para quien no esté al tanto, el 11 de Mayo de 2015 gané un concurso patrocinado por Arroz La Fallera dentro de una campaña iniciada por el guionista y comediante Eugeni Alemany para conseguir que la paella formara parte del conocido estándar de Emojis de Unicode (los dibujitos del Whatsapp, para los menos duchos en esto de la tecnología). El concurso tuvo dos fases. Primero tenía que publicar un tuit original y conseguir los máximos RT posibles y a las 20h anunciaron los finalistas (entre los que me encontré) que tenían que conseguir RT al tuit de su candidatura como finalista. Y gané. Esto da para otro articulo, lo sé. El premio era un viaje a San Francisco que a posteriori se ha convertido en un viaje por Estados Unidos.
Este viaje habría sido imposible sin la ayuda de todos los que me retuitearon y, desde luego, sin la ayuda de todos los amigos, conocidos y desconocidos que difundieron mi candidatura como si fuera suya, nada más verme ganador anuncié que organizaría al menos una #PaellaTuitera de agradecimiento.
Con todo ya cerrado, el viaje programadísimo y las ganas de despedirnos de nuestros amigos a la par que agradecerles su ayuda, hablamos con Arroz La Fallera y WikiPaella para comentarles lo que íbamos a hacer y les gustó el plan. Tanto que se sumaron! En la PaellaTuitera San Francisco Edition de València fuimos casi 30 personas entre instagramers, tuiteros, valencianos y amigos de todos los lugares, sectores, pueblos y colores. Lo pasamos genial bebiendo y riendo, además de disfrutar de uno de los mejores sitios para tomar una paella de València.
La paella de Casa Ripoll
Cuando les conté a los chicos de Arroz La Fallera y WikiPaella mis planes y ellos se sumaron tuve claro cual era su labor principal: proponer el sitio. Porque los contactos de uno de los mayores productores de arroz del mundo y el gusto del proyecto de catalogación de paellas más ambicioso que conozco seguro que nos llevaban a un buen sitio. Y el elegido fue el restaurante Casa Ripoll, situado en en Módulo 7 en pleno Paseo de la Malvarrosa (justo al lado tiene una caseta de la Cruz Roja, por si te cuesta de encontrar).
Conocido por preparar una paella de las buenas y aprovechando que está en un sitio muy turístico se ha ganado una fama casi mundial y no nos decepcionó. El menú que nos pusieron incluía unos entrantes con unas patatas bravas correctas, unas clotxinas buenas aunque faltas del sabroso caldito que tanto gusta y unos chipirones que me encantaron.
- Patatas bravas de Casa Ripoll
- Chipirones de Casa Ripoll
- Clotxines de Casa Ripoll. Foto de @25p
Para las paellas desde Casa Ripoll nos recomendaron preparar dos distintas, la primera una Paella Valenciana con caracoles y un Arroz del Senyoret y servir media ración a cada comensal en el mismo plato. Podéis ver su aspecto más de cerca en la foto que encabeza el artículo (cada mitad es una de las paellas).
Según lo que postula WikiPaella, en Casa Ripoll tomamos una sabrosa Paella Valenciana de la Ribera Baixa, donde está la casi ‘denominación de origen’ de Sueca, por lo que no resulta raro ver caracoles como ingrediente más atípico junto con la bajoqueta, pollo o el arroz que todos esperamos. Como estuvimos un buen rato (no menos de 5 minutos de reloj) haciendo fotos nos la comimos más bien fría pero aún así el arroz tenía un punto perfecto, igual que la verdura y la carne. Estaba simplemente espectacular. Yo, que soy un adicto al socarrat lo eché de menos pero la paella estaba muy buena.
El toque marinero lo dio el Arroz del Senyoret, un arroz de pescado y marisco muy típico del levante en el que todos los ingredientes vienen ya pelados y troceados, así nos ahorramos pelar las gambas por ejemplo. He de confesar que soy fan de este plato, me pareció que estaba muy bueno, con un toque meloso que me gustó aunque me gusta más meloso (sin pasarse, ojo).
A decir verdad, creo que servir media ración de cada arroz en cada plato me pareció una idea perfecta porque los dos platos hacían honor a la fama de Casa Ripoll. Queda anotado como sitio al que llevar a quien quiera hacer turismo por València y comer una buena paella en la playa.
Lo más irreverente del tuiterío local y Arroz La Fallera
Casi 30 personas éramos, siendo la mayor acumulación de tuiteros, instagramers y blogueros que haya visto València, al menos desde el último TuitBirras. Todo ello para agradecerles su participación (e incluso casi campaña de márketing express) a mi favor en el concurso de #PaellaEmoji organizado por La Fallera. Gracias a amigos como estos se puede organizar una paella en la que no falten las risas, las bromas, los “que se besen Carballo y Pilar” cual boda, los viva la paella y las bromas sobre lo valencianos que somos todos. Aixó heu pague jo.
Y precisamente un “aixó heu pague jo” (eso lo pago yo) es lo que hizo Arroz La Fallera. No se puede ser más valenciano! Cuando les comenté mi idea de organizar una PaellaTuitera con los amiguetes en agradecimiento quisieron sumarse y, dado que íbamos a utilizar el hashtag #PaellaEmoji, decidieron correr con la cuenta y se ofrecieron a traer camisetas y chapas a todos los asistentes – asegurándose un buen impacto en redes sociales-. Es un gusto y un placer tuitear nuestras paellas cuando se tienen estos detalles! Lógicamente, nadie sabía de las intenciones de Arroz La Fallera, precisamente para que los asistentes a la paella no vinieran “aprovechando que es gratis”, así que estuvimos viejos y nuevos amigos disfrutando y consiguiendo llevar el #PaellaEmoji un poco más cerca del estándar UNICODE 9.0 que se aprobará en Febrero de 2016.
¿Qué es una #PaellaTuitera?
Lo de organizar una #PaellaTuitera no es gratuito. Las paellas de tuiteros son algo habitual en “la terreta” gracias a Jose Luis Lluesma, que periódicamente se encarga de organizar quedadas de tuiteros, instagramers y gente 2.0 en general (aunque sin discriminar a los menos techies, por supuesto). Estas quedadas suelen tener un eje central: La paella. Porque pocas son más apreciadas que un buen vermut antes de la paella, un buen plato y una sobremesa que bien puede alargarse hasta la hora de cenar. Puedes enterarte de las paellas tuiteras en su cuenta personal de twitter @Lluesmaster y en @PaellaTuitera