La ciudad de València y sus alrededores tienen un montón de atracciones y sitios para pasar días divertidos pero si ampliamos un poco nuestra búsqueda, en el interior de la provincia de Valencia encontramos un pequeño oasis, la Albufera de Anna o el lago de Anna, como también se conoce. Este pequeño paraje está situado en el municipio de Anna y nos ofrece un montón de posibilidades para pasar un día en la naturaleza y disfrutando de un buen baño.
¿Qué es la Albufera de Anna?
Como su propio nombre indica, la Albufera de Anna es básicamente un lago formado gracias a la multitud de manantiales de la zona donde entre montañas encontramos este paraje. La gente del pueblo y cercanías acostumbran a pasar allí las tardes y los festivos más calurosos ya que es un lugar genial para disfrutar de la sombra de unos buenos árboles y de unas piscinas y cascadas geniales.
El lago en si mismo se extiende 180m de ancho por 300 de largo y está perfectamente urbanizado y vallado para que no se caiga nadie al agua ya que está prohibido el baño. Sin embargo, el ayuntamiento fue listo y antes de prohibir el baño en el lago construyó una suerte de piscina medio natural para que todo el mundo siguiera disfrutando del agua de manantial. Esta piscina está llena y funcionando non-stop durante todo el verano. Con un agua que está fría, pero fría de la hostia. Así que a un lado un lago de ensueño y al otro una piscina cuya agua llega mediante un montón de pequeñas cascadas y riachuelos. Ojo porque no vimos ningún socorrista cuando estuvimos allí y bañarse en la piscina está permitido en cualquier momento (yo he ido otras veces y me he bañado por la noche, por ejemplo).
Como el lago está completamente urbanizado pasear por su orilla da pié a un montón de fotos y la fauna y flora de la zona son el complemento perfecto. Además, hay zonas con mesas de camping para comer, merendar y cenar si hace falta, igual que otras zonas más pensadas para tomar el sol. Abundan las familias que llevan todos los bártulos para pasar el día y tú deberías hacer lo mismo.
Al ser un espacio protegido y con distintos servicios la entrada tiene un coste de 1’5€ por persona. No es una fortuna y la verdad es que teniendo en cuenta lo bien conservada que tienen la Albufera de Anna vale la pena. El pago se realiza antes de llegar al la zona del lago donde un guarda/voluntario te espera en al garita. Nosotros fuimos en coche, igual si llegas a pie no hay que pagar.
Diviértete con la fauna de la Albufera de Anna, vayas en la época que vayas te esperarán un montón de patos ávidos de que les des comida. Además en el lago hay posibilidades de pescar, o al menos eso pensaban los niños que vimos con sus cañas intentando hacerse con alguna carpa o barbo… Por otro lado, como paraje natural que es lo rodean sauces llorones, chopos, olmos, álamos, eucaliptos y plataneros, además de arbustos y plantas aromáticas como el romero, tomillo o lavanda y no es complicado ver bichos menos típicos como pequeñas serpientes y culebras, ranas o incluso zorros. No hay ningún peligro, de hecho, es divertido ver animales salvajes en la Albufera de Anna.
Cómo llegar
Anna está en el interior de la provincia de Valencia muy cerca de la ciudad de Xátiva, desde Valencia el trayecto nos llevará menos de una hora en coche por la A-7 en dirección Alicante por el interior o por l’Alcudia, al pasar el Barranc de la Mola tomaremos la salida 396 y las carreteras N-590 y N-580 nos llevará hasta el pueblo de Anna. Allí ya veremos indicaciones sobre el lago pero es muy fácil: La tercera salida de la rotonda de Anna te lleva directo su albufera.
La Albufera de Anna tiene los servicios que necesitas
Como ya hemos dicho para pasar el día en la Albufera de Anna hay que pagar pero una forma de no hacerlo es pasar allí unos días en el Camping que hay disponible y al ser un sitio rodeado de casas hay algunas que se pueden alquilar como casas rurales (si, la construcción loca también ha invadido este lugar). La verdad es que pasar un fin de semana en Anna con la familia es un buen plan. Si no te convence lo de bañarte en una piscina natural la piscina municipal está a 5 minutos del lago.
Nada más llegar a la zona de la Albufera de Anna verás la caseta de Información Turística, allí te informarán de las normas pero también de las múltiples posibilidades y rutas senderístas que puedes hacer. Junto a ella está el parking principal.
Otra cosa que se puede hacer es alquilar un barco de remos para navegar por la pequeña Albufera de Anna, en cada barco caben unas 5-6 personas como máximo y cuesta 5€ por 30 minutos. Si has cogido alguna vez un barco en el Estanque del Retiro ya sabes lo que es.
Lógicamente en un entorno como este y con tanta gente pasando la tarde y los domingos no podían faltar un par de chiringuitos y un restaurante. Así que ya sea para tomar un helado, merendar o zamparse un menú del día, el servicio existe y no es caro, lo cual se agradece.
Un paseo hasta el Gorgo de la Escalera
Una cosa que nosotros hicimos mal fue ir a pie a otra zona de Anna donde se permite el baño: El Gorgo de l’Escala o Gorgo de la Escalera. Para llegar a pie desde el lago hasta el gorgo sólo hacen falta 15 minutos pero la verdad es que la ruta no es nada del otro mundo, un montón de caminos llenos de casitas y campos al sol. En coche se llega en 3 minutos y no te pierdes nada.
- Bañistas en el Gorgo de la Escalera
- La cascada del gorgo
- Es una zona 100% salvaje
Si no hace calor es un paseo bien pero si el sol es abrasador id en coche. El Gorgo de la Escalera lo trataremos en otro post. Es una zona menos urbanizada que el lago, mucho más escarpada y desde luego muchísimo más natural, aunque igualmente lleno de gente bañándose e incluso practicando barranquismo.
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